La pasión de Bianca Carrillo-Velez por servir a los demás proviene de su familia. Ver la dedicación y el sacrificio de su madre la inspiró a hacer lo que pueda por su comunidad.

«Crecer con una madre soltera me convirtió en la persona que soy hoy», señaló Bianca. «Recuerdo cuando me despertaba a las tres de la mañana con ella para que pudiera llevarme donde mi niñera y, luego, conducir una hora hasta su trabajo. Siempre he visto a mi mamá trabajar arduamente, esforzarse por llegar a fin de mes y hacer lo que pueda por mí».

Bianca también se inspiró en un mentor a quien considera parte de su familia: un oficial de seguridad de su escuela que despertó su interés en la policía.

«Llamo padre adoptivo al oficial Price», explicó Bianca. «Me mostró lo que significaba respetar a todos y no juzgarlos. Decidí que quería ser oficial de policía debido al impacto que tuvo en mí el oficial Price».

En la escuela secundaria, se abrió un nuevo camino para Bianca. Ser la aprendiz de un asesor durante un programa de verano en una escuela primaria local produjo en Bianca un interés por el trabajo social. Bianca dio clases sobre temas como responsabilidad y compasión, y dedicó un tiempo especial a los niños que más lo necesitaban.

«Trabajaba de forma individual con los estudiantes que tenían dificultades para trabajar en grupo», comentó. «A veces tienes que sentarte con ellos, mirarlos a los ojos y hablar sobre lo que los agobia».

Cuando cambió su perspectiva profesional de la policía al trabajo social, Bianca vio una conexión entre las dos áreas. «Ambas giran en torno a ayudar a la comunidad», explicó. «Tienes que ser práctico en situaciones difíciles y debes hablar con personas con las que normalmente no hablarías. Hay muchas similitudes. La diferencia es que quiero trabajar más con los niños y las familias y así ayudar a construir su estructura para el futuro. Quiero desarrollar relaciones».

Bianca hace exactamente eso como voluntaria en un refugio local para quienes no tienen vivienda. Cuando vio a una madre soltera cuidando a seis niños, algunos de los cuales estaban durmiendo en el piso, le compró a la madre un colchón inflable. La propia experiencia familiar de Bianca hizo que deseara comunicarse con ella para ayudarla.

«Siento compasión por las madres que están haciéndolo solas», cuenta Bianca. «Solo quería ayudar como pudiera».

Bianca ahora es estudiante de primer año de Trabajo social en la Universidad Estatal de California, Fresno. Uno de sus profesores de Trabajo social se convirtió en su mentor, y ella disfruta del apoyo de sus compañeros que comparten su pasión por servir a los demás.

«Verlos a todos con la misma idea que tengo, que es querer ayudar a la comunidad, ha sido una experiencia increíble», explica. Bianca planea quedarse en Merced, California, la comunidad en la que creció, y servir como trabajadora social. Bianca dice que su propia experiencia le da confianza en su futuro.

«He pasado por muchos desafíos y los he superado todos», indicó. «Y sé que siempre lo haré».

FAMILIA FUNDADORA DE IBO: Jere + Eileen Dutt

La familia Dutt está impresionada por la resiliencia de Bianca y su enfoque en servir a los demás. Es ejemplar su voluntad de cambiar para seguir su visión. Estamos orgullosos de poder ayudarla de una manera pequeña para perseguir su sueño de trabajar en el servicio comunitario.

- La Familia Dutt